ORACIÓN

AÑO JUBILAR DE

SAN FRANCISCO DE BORJA

2021 - 2022


Padre Nuestro

que, en San Francisco de Borja, nos das un modelo evangélico

de esposo y padre de familia,

de gobernante al servicio de las necesidades de sus ciudadanos

y de religioso de profunda vida interior y amor a la eucaristía.

  

Te pedimos que, en la gozosa celebración de su Año Jubilar,

nos concedas, por su intercesión,

estar atentos a tus llamadas en nuestra vida cotidiana

y disponibles para responder a ellas

en identificación y  seguimiento de Cristo nuestro Señor.

 

Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. 

Amén



EXPLICACIÓN

La oración está dividida en dos partes: una primera en la que se ha querido trazar un breve perfil biográfico de San Francisco de Borja y una segunda que concrete una petición.

En la primera parte destacan tres aspectos de la vida de San Francisco de Borja que son especialmente interesantes para nuestro tiempo: su vida familiar, su compromiso como gobernante y su vida interior centrada en la eucaristía.

La segunda parte, está inspirada en peticiones de los Ejercicios ignacianos que, con seguridad, San Francisco de Borja hizo suyas: escuchar la llamada de Dios, estar dispuestos a responder a ella con todas las consecuencias en la identificación con la persona y misión de Cristo.

PARA ACERCARTE AL PERDÓN

Señor Jesús, tú que devolviste la vista a los ciegos, sanaste a los enfermos y perdonaste a Pedro después de su traición, concédeme la gracia de un sincero arrepentimiento por todos mis pecados. 

Que comprenda la gravedad de cada una de mis faltas, y que, confiando en tu misericordia infinita y en la intercesión de la Virgen María, de los ángeles y de todos los santos, proponga firmemente nunca volver a pecar, luchar contra toda clase de mal y caminar siempre en el camino del bien, de la verdad y de la justicia.

Pero te pido, ante todo y sobre todo, que me ayudes a vivir como vivías tú, a mirar como tú mirabas, a amar como tú amabas.

A ti, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén


Gracias, Padre, por tu abrazo de perdón. 

Gracias, Señor Jesús, que con tu muerte nos has redimido del pecado y nos has dado a beber el agua de la vida eterna. 

Gracias, Espíritu Santo, por arrancar de nosotros el corazón de piedra y darnos un corazón de carne. 

Ayúdame, Señor, a ser testigo de tu amor en el mundo junto a todos mis hermanos, los miembros de la Iglesia, que como una verdadera madre me ha reconciliado y me ha hecho gustar de tu perdón. Amén.